PRESENTE NEGRO

Me había propuesto no postear sobre Vélez (un poco por cábala y otro poco porque este no es un sitio partidario) pero los tiempos que corren de irregularidad y desconcierto que tienen como ápice la humillante derrota de ayer me obligaron a quebrantar esa autoimposición llevado más que nada por la bronca y la vergüenza, para lo cual voy a citar textualmente algo que escribí hace algún tiempo en este excelente sitio en el cual colaboro.

Decía allá por el mes de Julio:

"El título del 2005 llegaba luego de varios años de "vacas flacas" siendo fruto de la coherencia y del trabajo de inferiores a punto tal que Vélez llegó a presentar ese campeonato un equipo formado por 9 jugadores de sus ligas menores entre los 11 titulares. De esa forma se había logrado un equipo formidable con una gran solidez defensiva (a excepcion de ya sabemos quien) un aguerrido mediocampo y una contundencia ofensiva envidiable que seis meses antes había peleado el apertura 2004 hasta el final (y lo había perdido por culpa de ya sabemos quien). El título se daba entonces como corolario de un gran esfuerzo y potenciado por esa frustración...
Este presente dista muchísimo, como dije antes, de todo aquello; la coherencia en cuanto a la promoción de jovenes del club fué perdiendo fuerza y así es como el equipo se pobló de contrataciones de medio pelo para abajo (dignas de un equipo de mitad de tabla) el respeto que se le tenía a Vélez se fué perdiendo y achicándose las chances de campeonar. El nuevo cuerpo técnico que, como tantos otros esperanzados hinchas, recibí con beneplácito ha dado muestras de no encontrar el rumbo y así es como están las cosas hoy de cara al torneo que se avecina.

No quiero ser apocalíptico ni pájaro de mal agüero, así es que esperaré el apertura con grandes espectativas y deseos de que todo salga bien; pero tengo que reconocer que eso me cuesta un poquito más que hace un tiempo...."

Lamentablemente estos tiempos dolorosos de derrotas humillantes muestran (sino directamente corroboran) que seguimos por la senda incorrecta y que sólo la mediocridad del campeonato hace que no sea tan evidente.

Pol